7 razones más para evitar que los niños coman chuches
Es importante hacer saber a los niños que se puede consumir alguna chuchería de manera ocasional, pero nunca convertirlo en una rutina ya que puede provocar una serie de problemas relacionados con la salud bucal.
1.Caries dental
El principal problema que ocasiona el consumo abusivo de chucherías es la aparición de caries en los dientes. Las bacterias de la boca se nutren de los azúcares y generan un ácido que daña el esmalte.
2. Aumento de peso
Es habitual que los alimentos ricos en azúcares también sean ricos en calorías. Por ello, su consumo provoca que el cuerpo gane peso con mayor facilidad. Si se come con asiduidad, la aparición de sobrepeso y obesidad será mucho más probable.
3. Diabetes
La diabetes es una enfermedad muy extendida y ocasionada, en la gran mayoría de
los casos, por un exceso de glucosa en sangre. Las personas que consumen azúcar en abundancia tienen un riesgo más elevado de desarrollar diabetes.
4. Hambre descontrolada
El consumo de azúcares de manera diaria da lugar a la aparición de resistencia a la leptina en nuestro cuerpo. Esta hormona controla la sensación de hambre. Su falta de eficacia puede provocar pérdida de control sobre el hambre, que inevitablemente empujará a los niños a pedir comida más a menudo.
5. Insuficiencia renal
La pérdida progresiva de las funciones renales es otra de las grandes consecuencias de ingerir azúcar en grandes cantidades. Cuando comienza a detectarse la presencia de albúmina (proteína) en la orina, es señal de que algo va mal. Al igual que la diabetes, es un problema que se desarrollará si el abuso de azúcar se prolonga en el tiempo.
6. Enfermedades cardiovasculares
Varios estudios han determinado la relación que existe entre el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y el consumo de azúcar en exceso.
7. Mala alimentación
Aquellas personas que consumen gran parte de sus calorías diarias de productos ricos en azúcar suelen sufrir deficiencias en elementos esenciales para el adecuado funcionamiento del organismo como la vitamina A y C, el ácido fólico, el calcio y el hierro. ¡Educa a los niños desde sus primeros años de vida!
Es habitual pensar “que a nadie le amarga un dulce”. ¡Y es verdad! Pero hay que ser consciente de que las chucherías, entre otros alimentos que contienen gran cantidad de azúcar, no son saludables y, por lo tanto, su consumo debe ser esporádico. Si las reservas solo para las grandes ocasiones, los niños valorarán más esos pequeños premios.