¿Cómo saber si mi hijo tiene caries?
¿Cómo saber si nuestros hijos tienen caries? Como adultos, sabemos detectar cuándo sentimos un dolor fuera de lo común en la boca y cómo actuar. En cuanto podemos, llamamos al dentista para pedir cita y nos indique qué tratamiento seguir para remediarlo. Pero, ¿y los niños? ¿Saben lo que ocurre y lo comunican? Lo más habitual es que se quejen de que les duele una muela o un diente, aunque hay más indicadores que pueden evidenciar que, efectivamente, tienen caries.
Síntomas de que los niños puedan padecer caries
Un fuerte dolor
Si un niño se queja de que siente dolor en la boca tras comer dulces, alimentos fríos o alimentos calientes y esa sensación se alarga un tiempo después de ingerirlos, es posible que tenga caries. Una pequeña exploración en su boca puede ayudarnos a detectarla. Si descubrimos pequeños puntos blancos, marrones o negros, es posible que tenga caries. . Ante la mínima sospecha, es fundamental pedir cita con el odontopediatra para ponerle solución lo más rápido posible. Si ya vemos que tiene un agujero en un diente o una muela, la caries está bastante avanzada. Debemos acudir a la consulta tanto si es un diente definitivo como si es de leche y es esencial tratar la caries cuanto antes.
Otros indicativos de que tiene caries
También es posible que el pequeño tenga caries pero que no experimente ningún dolor por ello. En este caso, será más difícil detectarla porque no se quejará. Si vemos que el color de una de sus piezas dentales cambia de color y torna hacia un tono más amarillento u oscuro, es posible que tenga caries.
¿Cómo podemos darnos cuenta de que tiene una caries si no padece dolor? Si la tiene en uno de los dientes más visibles, podremos darnos cuenta enseguida, en cuanto apreciemos ese cambio de color cuando abra la boca para hablar, reírse o comer. Sin embargo, si ocurre en una muela, es más difícil apreciarlo porque tendríamos que hacer una exploración más profunda para ver la caries.
Detectarla cuanto antes
La manera de detectarla cuanto antes es acudir al odontopediatra cada seis meses. En cada revisión, este profesional inspeccionará la boca del pequeño con detenimiento y podrá analizar si tiene algún problema en la boca o no. Localizará las caries o el exceso de placa y sarro que, de no eliminarse, pueden dar lugar a las caries. El dentista hará una limpieza profunda en su boca y os dará las mejores pautas para que su rutina de higiene sea la óptima para evitar enfermedades. Si descubre alguna caries, será la persona indicada de poner en marcha el tratamiento idóneo para su caso concreto.
¿Cómo se tratan los dientes de leche?
Si los niños acuden desde pequeños al dentista, asumirán que es una actividad cotidiana y se acostumbrarán a estas visitas. Es importante tratar el tema con naturalidad para que no coja miedo a este profesional, quien será el encargado de garantizar la salud de su boca.
También es fundamental, por supuesto, que cuiden sus dientes en casa cada día. Para ello es muy importante inculcarles desde la más tierna infancia unos buenos hábitos de higiene bucal. Una de las formas más fáciles de hacerlo es que tomen a sus padres como ejemplo. Si os cepilláis los dientes juntos después de cada comida, lo incorporará en su vida diaria con naturalidad. Además, puedes adquirir cepillos de dientes con sus personajes preferidos y pasta de dientes de sabores suaves para que disfruten aún más de este momento de higiene bucal.