¿Cuáles son las principales funciones de la saliva?
Una de las principales funciones de la saliva es equilibrar las bacterias de la boca y ejercer control sobre ellas. Pero no es la única, ya que la saliva remineraliza los dientes, equilibra el pH de la boca, hidrata los labios y la mucosa bucal, participa en labores antimicrobianas e interviene en el gusto, el habla y la digestión (forma el bolo alimenticio).
En un milímetro de saliva conviven miles de bacterias y, de ellas, la mayoría tienen una función protectora, aunque otras pueden ser perjudiciales. Por ejemplo, los resfriados son fácilmente contagiosos a través de nuestra saliva ya que, al hablar, toser, besar o estornudar los virus se propagan.
Ya sabemos, por tanto, que la saliva nos protege pero, ¿qué pasa si sufrimos sequedad en la boca? Puede dificultar la deglución de los alimentos, la digestión y provocar halitosis, ya que la saliva arrastra las bacterias causantes del mal aliento. Para evitar esta sequedad, debemos aumentar el consumo de agua, evitar refrescos y bebidas con alcohol y cuidar la higiene. Es importante lavar nuestras manos a menudo y tener nuestra boca limpia, con una pasta dentífrica adecuada y usando un buen enjuague bucal para eliminar y controlar estas bacterias de nuestra boca. Así, además, podremos prevenir determinadas enfermedades bucales.
Más datos sobre la saliva
Ya sabemos que la saliva es fundamental para nuestro cuerpo, pero… ¿Qué más cosas podremos saber en el futuro gracias a ella?
Hoy en día, existen varias investigaciones sobre su utilidad en el diagnóstico de enfermedades.
Por ejemplo, la concentración de proteínas en la saliva podría ofrecer información sobre el sida, la diabetes o incluso determinar si una mujer está embarazada con una sencilla muestra.
Con estos avances, se podría acelerar el proceso de diagnóstico de muchas enfermedades y así comenzar el tratamiento con mucha antelación, por lo que las probabilidades de éxito serían mucho mayores.
Otras funciones de la saliva en la salud bucal
- La saliva también participa en la función digestiva. Además, la saliva es básica para diferenciar el sabor de los alimentos.
- También interviene en el habla, manteniendo hidratados todos los componentes del cuerpo que participan en la emisión de la voz.
- La saliva actúa también como antiácido. Mantiene el pH neutro de nuestra boca y colabora en la buena conservación de los dientes, por supuesto, aunque debemos tener una buena higiene dental.
- En cuanto a la hidratación, para que la producción de saliva sea la adecuada, el organismo debe estar muy bien hidratado, ya que la gran parte de la composición de la saliva es agua. Esto a su vez, hace que la sequedad de la cavidad bucal sea un buen indicador de que el cuerpo necesita más hidratación.
Por ello, y gracias a ella, se acelera el proceso de curación de pequeños daños, por la cual cosa no debemos escupir como costumbre.