¿Debo usar hilo dental?
El cepillado es la base de una buena higiene bucal, pero por sí solo no consigue eliminar toda la placa bacteriana. Para deshacernos de los restos de alimentos y bacterias entre los espacios dentales es muy recomendable incluir la limpieza interdental en nuestra rutina diaria, ya sea mediante hilo dental o cepillos especiales para esta función.
Cuando el hilo dental se utiliza correctamente consigue eliminar más del 80% de la placa acumulada en estas zonas. De esta manera, podemos prevenir la aparición de problemas de encías, caries o halitosis (mal aliento). Es especialmente útil en las personas que llevan brackets o prótesis fijas, ya que facilitan retirar los restos acumulados entre los dientes y los aparatos.
En función del espacio que tengamos entre los dientes, debemos escoger uno u otro producto de limpieza interdental. El hilo dental es la opción más apropiada para personas con los dientes más bien juntos. Puede ser redondeado o plano (cinta dental) e incluir o no flúor y sabores. En cualquier caso es preferible escoger un hilo dental compuesto de un solo filamento, ya que los que tienen varios tienden a deshilacharse. Los hilos dentales con cera son más cómodos de usar, ya que se deslizan con mayor facilidad.
Si nuestros dientes están muy separados, debemos optar por un cepillo interdental. El tamaño debe ser el adecuado para que sean los filamentos y no el alambre los que entren en contacto con los dientes. Si es la primera vez que usas un cepillo interdental, te recomendamos consultar a tu dentista sobre el tamaño más adecuado.
La limpieza interdental debe realizarse una o dos veces al día, especialmente antes de acostarse y siempre después del cepillado – ¡no es un sustitutivo! Una técnica adecuada nos ayudará a eliminar mejor la placa sin dañar las encías. Si tienes dudas sobre la manera más adecuada de usar el hilo dental o los cepillos interdentales, te recomendamos que le eches un vistazo a este video.