El árbol de los chupetes

El chupete acompaña a muchos niños durante los primeros meses… pero es mejor dejarlo antes de los dos años para evitar problemas de salud bucal. Se trata de un hábito que les resulta muy reconfortante, por lo que a veces resulta muy difícil “convencerles” para que lo dejen. Por eso, hoy queremos dar a conocer una costumbre que nos puede ayudar en ese sentido: el árbol de los chupetes.

La tradición del árbol de los chupetes es bastante reciente, ya que se inició hace unos 30 años en el parque de Skansen, Estocolmo. Los empleados de la limpieza del parque se encontraban un montón de chupetes perdidos, por lo que se les ocurrió la idea de colgarlos de un árbol a modo de decoración. Los padres empezaron a colaborar colgando los chupetes de sus hijos, para así convencerles de abandonar este hábito. La costumbre se hizo muy popular y empezó a extenderse por diferentes ciudades del mundo. En España podemos encontrar “árboles de chupetes” en Torremolinos, Sevilla, Logroño…

Usar un árbol de chupetes es una buena manera de animar a los niños a despedirse el hábito y tranquilizarlos. Podemos contarles un cuento para explicar el por qué de la costumbre, dejarle un dibujo o una nota o ir a visitarlo otro día para comprobar que está bien. También podemos aprovechar para inventar nuestro propio personaje al estilo del Ratoncito Pérez: ¿qué tal un Hada de los Chupetes?

 

Fuente: https://www.facebook.com/Arboldeloschupetesavila