La importancia de la sonrisa
Cuanto más evolucionan las redes sociales, más expuestos estamos. Y siempre nos preocupamos de mostrar en ellas nuestra mejor sonrisa. Cuando sólo podíamos acceder a las redes a través del ordenador, seleccionábamos aquellas fotografías en las que más felices aparecíamos. Ahora, con el ‘boom’ de la inmediatez y los stories, siempre estamos preparados para lucir nuestra mejor cara a nuestros seguidores. No sólo les pasa a los famosos o influencers, todos queremos enseñar nuestra mejor versión a través de las pantallas.
Instagram es la red social en la que mostramos nuestro mejor perfil: casas impolutas, cenas deliciosas, amistades eternas y modelitos (o modelazos). En resumen, nuestros momentos más felices. Es imposible que en cualquier vida (¡Cualquiera! Hasta la más idílica) todo sea perfecto. Pero en las redes lo parece, muchas veces por el ‘postureo’. Esto puede parecer negativo, pero no lo es. Las redes sociales como Instagram o TikTok son puro entretenimiento y, como tal, las consultamos para divertirnos. Lo que debemos tener claro es que a través de ellas sólo nos asomamos a una pequeña ventana de la vida de los demás, aquella parte que quieren mostrar.
Enganchan porque son un espacio feliz al que acudir para contagiarnos de ese ánimo y para comprender que, aunque todos atravesamos momentos complicados, detrás de una mala racha siempre llega una buena que volverá a sacarnos lo mejor de las sonrisas.
A todos nos gustan las personas que sonríen. La sonrisa es lo primero que percibimos de una persona que se nos acerca, es el primer contacto positivo que tenemos con alguien. Una sonrisa abierta, franca, amplia y sincera nos hace sentir cómodos y relajados. Instintivamente sabemos reconocer cuando una sonrisa es de verdad y cuando la están fingiendo: las sonrisas verdaderas reconfortan. Cuando una persona sonríe de verdad tendemos a creer lo que nos cuenta, a aceptarla y a estrechar lazos.
La sonrisa es nuestra mejor aliada. ¡Y además es muy fácil ponerla en práctica! Se necesitan sólo siete músculos para dibujar una sonrisa en nuestra cara, mientras que para enfadarnos utilizamos 34. La sonrisa es tremendamente poderosa: es la consecuencia de un estado de ánimo, pero al mismo tiempo es capaz de reconfortarnos cuando nos encontramos mal y nos ayuda a que vuelva a nosotros la alegría.
Sonreír es también nuestra mejor presentación: dice muchísimo de nosotros. Por ejemplo, cuando conoces a alguien nuevo, ¿verdad que te da mucha más confianza si sonríe que si está serio? Por ello, cuidar de nuestra sonrisa es muy importante. Una sonrisa sana, limpia y bonita transmite confianza. Sin embargo, tener los dientes sucios, el aliento desagradable, las encías en mal estado o dientes caídos afea la que es nuestra mejor tarjeta de visita.
¿Y cuál es la manera de que nuestra sonrisa esté bonita y sana? ¡Exacto! Siguiendo una buena higiene bucal a través de tres pasos imprescindibles:
- Primer paso: Utilizar un cepillo y un dentífrico acorde a tus necesidades.
- Segundo paso: Perfeccionar el cepillado entre los dientes con la ayuda de un interdental.
- Tercer paso: Completar la rutina utilizando un enjuague (utilizar aproximadamente 15ml y utilizarlo durante 30 segundos).
No debemos olvidar, al menos una vez al año, hacer una visita a nuestro dentista. ¡Este profesional se asegurará de que todo va viento en popa dentro de nuestra boca!