¿Las bebidas gaseosas causan caries dentales?
Las bebidas gaseosas son parte del día a día para muchas personas. Por ejemplo, solo en 2012 los españoles consumimos una media de 33’7 litros de bebidas con gas por habitante. A los niños les encanta su sabor dulce, y para los adultos las gaseosas sin azúcar son una alternativa baja en calorías. Pero conviene saber que, incluso en sus versiones con edulcorantes, las bebidas con gas pueden ser perjudiciales para la salud bucal.
Las bebidas gaseosas “normales” contienen azúcares como la sacarosa y la fructosa, que acidifican la saliva facilitando la desmineralización del diente. Esta desmineralización afecta al esmalte dental y facilita la aparición de caries y sensibilidad dental. Este ambiente bucal acidificado también puede afectar negativamente a las encías.
Por su parte, las bebidas “bajas en calorías o light” contienen edulcorantes sin calorías como el aspartamo o la sacarina. Estos edulcorantes también tienen un efecto acidificante, por lo que pueden igualmente erosionar y desgastar el esmalte dental. En ambos casos, este tipo de bebida suele estar aromatizado con saborizantes como ácido fosfórico o ácido cítrico, que incrementan sus efectos negativos.
Las bebidas de cola son especialmente perjudiciales para las prótesis dentales, ya que pueden teñirlas o deslucirlas.
¿Significa esto que hay que renunciar a las bebidas con gas?
No, pero al igual que con los dulces y otros alimentos ricos en azúcar, es conveniente moderar su consumo. En el caso de los niños, puede estar recomendado el uso de pajitas, ya que facilitan que la bebida permanezca menos tiempo en la cavidad bucal. Hay que recordar que los dientes de leche son más frágiles y por tanto más vulnerables ante la erosión.
Si estamos vigilando las calorías, podemos optar por infusiones o agua con o sin gas.