Mi hijo tiene un diente de leche negro después de un golpe
A los niños les encanta jugar. Siempre están corriendo, persiguiéndose unos a otros, lanzándose pelotas… Y alguna vez terminan en el suelo o con algún golpe. Por lo general, estos choques son muy leves, basta con un “sana, sana, culito de rana”, y a los pocos minutos están jugando de nuevo. Pero otras veces pueden traer alguna complicación. Si tu hijo se da un golpe en la boca, se podría dañar alguno de sus dientes, que con el paso de las horas y días, puede volverse negro, aunque también puede ponerse gris, marrón o amarillo.
Esto pasa porque la sangre deja de llegar al diente después de recibir la lesión, y entonces los minerales como el hierro se filtran dentro de la dentina que protege el diente. A medida que la sangre avanza, la pieza se va oscureciendo. El color más oscuro puede tardar en aparecer entre dos o tres semanas después de golpearse.
Otras razones por las que un diente se puede oscurecer
La coloración oscura también puede deberse a una caries infantil en estado avanzado. Aunque pueda parecer que las lesiones que aparecen en los dientes de leche no afectarán a la dentadura definitiva, lo cierto es que sí puede verse afectada y los niños con caries en los dientes de leche tienen mucho más riesgo de caries en los dientes permanentes. Otra razón son las tinciones debidas a la alimentación y bebidas, e incluso, en ocasiones, algunas bacterias pueden provocar ciertas manchas en los dientes de los niños.
¿Cómo determinar la gravedad del golpe?
Es difícil saberlo solo con mirarlo. Además de volverse más oscuro, otro síntoma es la hinchazón o la aparición de pus en la zona. El diente puede moverse debido a la destrucción del tejido que lo rodea. El dolor es otro de los síntomas antes de la necrosis pulpar -la muerte del diente-. Cuando el nervio se ve afectado por un fuerte golpe puede desarrollarse un dolor localizado, intenso y agudo. Solo un odontólogo, tras una revisión, podrá evaluar la gravedad y determinar cómo se puede actuar.
¿Qué tratamiento debe seguir mi hijo si oscurece su diente?
Cada paciente es único y su situación es particular. El tratamiento idóneo para solucionar el problema tendrá que decidirlo el odontólogo. No es lo mismo que la pieza dental afectada sea un diente de leche o uno definitivo. Si su hijo sufre este problema, te recomendamos acudir cuanto antes al especialista para que evalúe el estado de la pieza dental y decida cuál es el tratamiento más adecuado para el pequeño.
Si el diente con necrosis pulpar ya es una pieza dental definitiva y no de leche, se puede recurrir a una endodoncia con la que se limpiará y sellará el conducto, evitando que las bacterias se diseminen. Después de la endodoncia, se puede blanquear el diente con el nervio muerto para que recupere su color natural o colocar carillas.
Otras posibles consecuencias de un golpe en los dientes y cómo actuar:
- Sangrado: limpiar la sangre y acudir al odontopediatra.
- Fractura parcial del diente: en los siguientes días hemos de visitar al odontopediatra. Si hemos encontrado y guardado el pedacito de diente se lo pueden pegar.
- Aflojamiento del diente: darle al peque una gasita humedecida para que la muerda y mantenga el diente en su sitio hasta llegar al odontopediatra, que se lo colocará en su lugar si es posible o determinará el tratamiento a realizar.
- Caída total del diente (avulsión): buscar el diente inmediatamente. Si está limpio, cogerlo sin tocar la raíz y colocárselo inmediatamente (ha de quedar a la misma altura que el resto de los dientes). Dar al niño una gasa humedecida para mantener el diente en su sitio y, claro está, acudir al odontopediatra de urgencias. Hemos de tener en cuenta que, si al encontrar el diente está sucio, debemos lavarlo, pero sin frotar porque dañaría las células del diente. Y claro, si no somos capaces de colocárselo, hemos de guardar el diente en un vasito cubierto por suero fisiológico, leche o saliva y acudir de inmediato al odontólogo de urgencias.
En los días posteriores, de 10 a 15 días, deberá seguir una dieta blanda, ya que no podrá morder con la misma intensidad. También se tendrá especial cuidado en la limpieza de los dientes accidentados, usando un cepillo dental suave y enjuagando con un enjuague bucal especial. En los menores de 6 años es preferible aplicar el enjuague bucal en una gasa para evitar que se lo traguen. Ah, ¡y nada de deportes de contacto en los días siguientes! Los papis debemos controlar con frecuencia los dientes golpeados, porque pueden producir desplazamientos poco evidentes, pero con posteriores consecuencias.