Pautas de higiene bucal en niños y adolescentes

Dentro de nuestra práctica diaria vemos en la clínica diferentes grupos de edades. En cada grupo adecuamos las pautas dependiendo del rango de edad y de la situación dental.

Distinguimos tres grupos de edad:

  • Niños de 2 años a 6 años (INFANTIL);
  • Niños de 6 años a 12 años (JUNIOR);
  • Niños de 12 a 16 años (ADOLESCENCIA).

Los niños entre 2 y 6 años presentan una dentición temporal completa en la mayoría de los casos. Es muy importante motivarles desde esta edad en el cuidado de sus dientes. Y para ello es clave el uso de rutinas, tanto para cepillarse los dientes como para acudir a las revisiones del dentista.

Desde los 2 hasta los 8 años de edad, recomendamos la supervisión del cepillado por un adulto, ya que de este modo tendremos la seguridad de que lo hacen correctamente.

Cuando el niño acude a la clínica le instruimos junto con los padres en una técnica de cepillado acorde a su edad. Para ello recomendamos utilizar un cepillo pequeño y blando, que se adapte a la anatomía de la boca y a la mano del niño (infantil), así como una pasta de dientes que contenga niveles de flúor recomendados hasta 1000 ppm. De esa forma estaremos tranquilos en caso de que el niño ingiera algo de dentífrico durante el cepillado. Es importante que utilicen una pasta con flúor desde pequeños ya que les protegerá frente a la caries.

Hoy en día contamos en el mercado con una gran variedad de pastas con sabores y diseños muy atractivos que les harán más ameno el inicio en la técnica del cepillado.

Durante la etapa inicial nuestro reto, y el de los padres, será que el niño adquiera el hábito del cepillado. Con ello estaremos previniendo posibles caries en la etapa siguiente, en la que comenzará con la erupción de los dientes definitivos.

Entramos en la etapa de los 6 a los 12 años. En ésta etapa los niños presentan una dentición mixta, lo que conlleva un alto riesgo de caries.

En varias Comunidades Autónomas contamos con el PADI (Programa Dental Infantil), el cual cubre la asistencia dental de los menores desde los 7 hasta los 15 años.

Este programa ayuda al establecimiento de rutinas y controles en los niños y a la detección de cualquier patología a tiempo.

Para esta edad la mayoría ya tienen asimiladas las rutinas de cepillado, y lo que solemos trabajar con ellos es un repaso de la técnica. Para ello nos ayudamos de reveladores de placa, a fin de poderles indicar dónde deben incidir más para conseguir un mejor cepillado. En esta etapa seguimos insistiendo en que usen un cepillo pequeño y blando que se adapte a la anatomía de la boca y a la mano del niño en ésta etapa (junior). En cuanto al uso de la pasta de dientes seguimos recomendando una pasta con flúor. Podemos ya usar un dentífrico que contenga un contenido en flúor de hasta 1450 ppm, ya que durante esta etapa necesitaremos mayor protección frente a la caries.

También nos gusta introducir el apoyo de un colutorio con flúor una vez al día, preferiblemente en el cepillado de la noche, para potenciar el efecto de la pasta de dientes.

Seguimos insistiendo a los padres en la importancia de los hábitos de higiene buco-dental de sus hijos y les recomendamos hacer controles semanales con reveladores de placa, para así motivarles a conseguir un buen cepillado. Ésta es una etapa donde el recambio de dientes es constante y en los espacios entre dientes por perdida de uno intermedio se favorece la acumulación de placa bacteriana, por lo que es fundamental tener en cuenta todos los consejos anteriores.

 

En la última etapa de 12 a 16 años nuestros niños finalizan el cambio de dentición pasando de una dentición mixta a una definitiva. Asimismo, los niños experimentan cambios hormonales importantes (adolescencia), que también pueden alterar los hábitos adquiridos hasta ahora.

Nuestra labor en clínica es sobre todo de motivación para que realicen los tres cepillados diarios y controlen las dietas abundantes en azúcares refinados.  En este caso iremos introduciendo nuevas herramientas como el cepillo de dientes eléctrico, el cual, además de conseguir unos mejores resultados a nivel mecánico, es más fácil de manejar, lo que ayuda a la motivación y al logro de una buena rutina de cepillado.

En esta etapa comenzamos también a incidir en la limpieza interdental y les enseñamos con ese fin a utilizar la cinta dental. Al principio esta técnica puede resultarles algo complicada, pero nos interesa que en ésta edad vayan introduciéndola en su rutina poco a poco. Con ello conseguiremos que lleguen a la edad adulta realizando un cepillado completo.

En lo referente a las pastas de dientes y colutorios seguimos insistiendo en que contengan flúor, si bien durante esta época comienzan a aparecer las primeras gingivitis por acumulación de placa, por lo que en estos casos, también recomendamos el uso puntual de pastas especificas para la gingivitis.

En ésta franja de edad finalizamos con la cobertura del Programa Dental Infantil (PADI), habiendo conseguido que los niños que comenzaron con 7 años adquieran al final de la adolescencia los hábitos de higiene buco-dental así como las rutinas de controles en la clínica dental.

 

Hemos intentado definir las necesidades de cada etapa, pero para todas las edades hay unas pautas comunes:

  • Insistimos mucho en el tipo de dieta procurando reducir al máximo los azúcares, evitando azúcares refinados y bebidas azucaradas.
  • Recomendamos una dieta rica en frutas y verduras, ya que éstas inciden directa y positivamente en nuestra salud oral.
  • Recomendamos que los niños acudan al dentista a partir de los cuatro años, ya que desde pequeñitos se asimilan más eficazmente las rutinas  y se quitan antes y mejor los miedos.
  • El tiempo de cepillado nunca debe ser menor de dos minutos, para ello sugerimos usar relojes de arena para los más pequeños.
  • El cepillo de dientes, así como el cabezal del cepillo eléctrico se cambian cada tres meses. Una buena idea es hacerlo coincidir con el cambio de estación, así nunca se os olvidará.
  • Recordamos a los padres la importancia de que los niños no intercambien entre ellos los cepillos de dientes.
  • Para un cepillado completo es importante no olvidarse de limpiar la lengua, para ello existen limpiadores linguales específicos.