¿Necesitan los niños suplementos de flúor para sus dientes de leche?
Dentro de las diferentes medidas de prevención contra la caries en niños, el odontopediatra habitualmente incluye la aplicación de flúor.
La estructura dental que más se beneficia del aporte de suplementos de flúor es el esmalte, que aumenta su resistencia debido básicamente a la acción del flúor.
El flúor puede ser utilizado tanto de forma sistémica como tópica. Se ha comprobado que el flúor ejerce principalmente su efecto protector de la caries en el periodo posteruptivo y sobre todo gracias a su acción tópica. Por otro lado, el flúor vía sistémica parece tener un efecto más modesto, actuando principalmente en el periodo preeruptivo al incorporarse a través de la circulación sanguínea, al esmalte en desarrollo.
La aplicación de flúor tópico va a favorecer la maduración posteruptiva del esmalte, la inhibición de la desmineralización del esmalte, la remineralización del esmalte y la disminución del potencial cariogénico de la placa dental. Todos estos aspectos influyen positivamente en la prevención de aparición de caries.
El método más usado para administrar flúor son los dentífricos fluorados. Las pautas recomendadas en función de la edad son las siguientes: hasta los 2 años el cepillado se debe realizar sin pasta dental para evitar que el niño lo ingiera. Otro método que se puede utilizar para aportar flúor dentro de la higiene diaria son los enjuagues bucales prescritos por el odontopediatra
La decisión de incorporar suplementos de flúor a los niños debe ser siempre valorada por un profesional ya que su ingesta excesiva en un corto periodo de tiempo puede ocasionar efectos tóxicos a nivel general y a nivel local, su exceso puede producir un esmalte con una mayor porosidad, hipomineralización.
Según las características y el riesgo de caries de cada niño, su odontopediatra, en las revisiones, valorará la necesidad y beneficios de aplicar flúor tópico en la clínica. Estos productos de aplicación profesional, presentan una alta concentración de flúor y generalmente se aplican cada 6 meses coincidiendo con la cita de revisión.