Quizás te sorprenda saber que existe una relación directa entre anemia y salud bucal. Pero cobra sentido, si recordamos que en la anemia el cuerpo no puede producir suficientes glóbulos rojos sanos y, por tanto, se ve afectado el suministro de oxígeno a los diferentes tejidos de todo el organismo, incluidos los de la boca.

 

De entre todos los tipos de anemia que existen, aquella causada por la deficiencia de hierro (anemia ferropénica) es la más común. Así pues, vale la pena insistir una vez más en la importancia de seguir una alimentación sana y variada que evite carencias nutricionales.

 

Por lo que respecta a la boca, más allá del calcio y el fósforo, el hierro es otro mineral fundamental para la salud bucal.  De ahí que, si no se encuentra en cantidades suficientes en el organismo, la anemia puede causar problemas bucodentales.

 

Al mismo tiempo, estas afecciones en boca y dientes pueden ser precisamente un síntoma de falta de hierro.

 

Cómo afecta la anemia a la salud bucal

 

• Infecciones bucales. Uno de los principales efectos de la anemia en la salud bucal es una mayor vulnerabilidad a sufrir algún tipo de infección en la boca por hongos, bacterias o virus.  

 

• Periodontitis. La falta de hierro se relaciona con una mayor incidencia de esta enfermedad de las encías y los tejidos que soportan los dientes. Al mismo tiempo, hay hipótesis que asocian la periodontitis crónica como una causa de anemia.

 

• Inflamación de la lengua. La deficiencia de este mineral también puede manifestarse con una lengua inflamada, irritada, con sensación de ardor, que produce dolor, más sensible, pálida o muy roja (en función del tipo de anemia) y cuya superficie se muestra lisa. Esta condición recibe el nombre de glositis.  

 

• Caries infantil. Son diferentes los estudios científicos que han relacionado la anemia y la deficiencia de hierro en niños con una mayor incidencia de caries infantil en edades muy tempranas

 

• Boqueras. La anemia ferropénica puede causar la aparición constante de fisuras o grietas en las comisuras labiales. Estas suelen ser dolorosas y pueden infectarse. Es lo que se conoce popularmente con el nombre de boqueras o perleche, aunque el término médico sea queilitis angular.

 

Asimismo, la anemia puede causar complicaciones a la hora de realizar ciertos tratamientos odontológicos. No solo por el mayor riesgo a desarrollar infecciones posteriores, sino al poder producirse un mayor sangrado o aparecer problemas de cicatrización.

 

Por esta razón, en caso de sufrir de anemia, es fundamental comunicarlo previamente al odontólogo.

También, para que pueda recomendar unos buenos hábitos de higiene bucal que ayuden a prevenir las consecuencias de la anemia en dientes y boca y eviten su empeoramiento.